sábado, 8 de diciembre de 2012

Cover o no Cover, he ahí el sexo…


 Hace tiempo atrás, luego de mi último pololeo largo, tuve la experiencia rica de intentar superar lo sucedido con un nuevo amigo que la vida me había puesto. Resultó ser que el amor estaba cerca de ahí y no lo sabía, luego habría de enterarme y comenzaron los problemas, cuando se declaró no le dí opción más que la de ofrecer mi amistad, pero para él no era suficiente y a la amistad le puso apellido, amigos con cover… Es curioso lo que un añadido signifique, por meses tuvimos buen sexo sin preocupaciones, luego sus sentimientos se fueron engrandeciendo y comenzó a aflorar la obsesión por poseerme, hasta que después de nueve meses lo logró y nos unimos en sagrado pololeo… Todo iba bien hasta que a la semana, el abandono físico y mental del mi pololo me mató toda la ilusión de querer estar con él. Luego de nueve días decidí terminar con algo a lo que no le veía ni le veo futuro. Ahora ha vuelto al ataque, ya que estoy soltero y pretende que volvamos, por mi parte que lo olvide, pero todo esto me hizo pensar: ¿es posible que el “amigo con cover” sea un mero tránsito entre el sentimiento y la concretud de una pasión obsesiva por alguien que te atrae o le atraes de manera descomunal?
Comenzaré remontando al sentido gay del asunto, los amigos con cover casi no son de palabra sino de acto, se tiene un amigo y se tiene sexo, pero nunca hubo un trato de por medio para ello, simplemente se da y contadas veces se habla del tema. En el caso heterosexual el hombre, generalmente, o el hombre de la relación, quien puede ser la mujer, debe hacer la aclaración para que no sucedan imprevistos, cosa de dejar rallada la cancha.
El punto de convergencia entre ambas tendencias sexuales es en la extraña situación que complica la relación de amistad con sexo: el involucrar sentimientos, pedazo de error. Eso implica celos, control, psicosis, y otras obsesiones varias, cómo es posible que algo tan simple como una amistad con sexo se vuelva en algo tan complicado como el querer terminar algo que no se ha empezado, es como decir me voy a divorciar de un matrimonio por el cual no me he casado aún.
Los problemas de tener amigos con cover son aturdidamente jodidos de la cabeza, te pueden joder la existencia y además del propio amigo… ¿Es posible tener amigos sexuales sin llegar al paso de la obsesión posesiva del sexo?  Es tan probable de que si como de que no. Ser posesivo de tu pareja sexual es básicamente sentir celos de que alguien más pueda hacerle lo mismo que tú le haces y te imaginas a tu amigo en los brazos de otro y no quieres que eso pase, porque él lo vive contigo, y no con otra persona. Y puede que en ningún caso exista amor!! Sólo que fue tal la sicosis sexual que creyó que podría ser amor, entonces te desliga de otra persona y te amarra a una relación sin amor que va a por terminar cualquier relación pre-existente entre ambos sin buenas consecuencias para ambos o uno solo de ellos…
El confundir celos de amigo con celos de sexo con celos de pareja es tremendamente complicado porque esto implica de una manera u otra que hay deseo de por medio, cosa que pone en peligro lo principal y la base de donde nació todo: la amistad, es muy riesgoso, pero el estar seguro de qué tipo de celos es el cual uno tiene es primordial para poder mantenerse ubicado en la situación correcta y en el momento indicado.
Usar la cabeza, la de arriba, por sobre la de abajo aclarará en todo momento qué es lo que siente el corazón. De esta manera, el sentimiento se aclara para tomar buenas decisiones, parte importante de una buena sanidad mental. Por otro lado, la amistad con raspe es admisible preferencialmente en personas con las cosas claras y resueltas, frías y no pasionales, debido a que cualquier movimiento en falso puede provocar un caos en la relación.

A mis queridos lectores,

Amaroh Hikaru Melville